Después de unos cuantos años de gestionar equipos, me he decidido por plasmar en la entrada de hoy los ciclos que todos, en cierta forma, han pasado independientemente de su tamaño o función.
Es un tema que ya está más que estudiado, ya que hay gente muy lista que ha escrito muchas páginas sobre el tema. No voy a revelar nada nuevo en a este respecto.
Sólo comentarte que un equipo es como cualquier cosa en esta vida, o se cuida y se le dedica tiempo, o su inercia natural es la la disfunción.
Y es que he encontrado este gráfico que me parece que da con la clave del tema:
Después de las etapas de formación, conflicto, normalización y desempeño (azul de la izquierda), viene el inevitable cambio de rasante, en donde empieza a pesar más el conformismo.
Es en este momento en donde es absolutamente necesario una transformación del mismo, no digo un cambio de sus miembros, digo una transformación en la forma de trabajar, en su reconocimiento, en las funciones, en todo aquello que pueda impactar en que, ese mismo equipo, comience una nueva tendencia ascendente hacia el desempeño.
También creo hay pocas cosas infinitas, lo que significa que finalmente llegará un punto que no haya transformaciones disponibles que puedan mantener un equipo en tendencia positiva para siempre. Pero es nuestra labor intentar conseguir el máximo número de interacciones hasta su disolución.
コメント