"Skynet es el nombre que recibe la inteligencia artificial que lidera al ejército de las máquinas en la saga de películas Terminator y el principal antagonista de ésta. En la saga, Skynet es una Inteligencia artificial capaz de controlar el arsenal militar de los Estados Unidos con independencia de los humanos."
Mira que soy muy fan de las máquinas y siempre defiendo que las utilicemos para nuestro bien, pero es que el avance de estos últimos meses está cogiendo una inercia un tanto preocupante.
De los creadores de Dall-E, llega chatGPT. Una página realmente simple pero que puedes hacer cosas realmente preocupantes:
¿Qué es? Básicamente es un chat basado en Inteligencia artificial que te resuelve todo. Y cuando digo todo es todo. Es como tener a google, a alexa y a tu amigo o cuñado que sabe de todo en una misma web.
Es un modelo que utiliza más de 175 millones de parámetros. Entiendas o no esto, te puedes hacer una idea de la magnitud. Estamos hablando de parámetros (columnas), no de registros (filas).
Imagínate que quieres que te haga el menú del día con ingredientes frescos y naturales, sin usar congelados, pues lo escribes tal cual y ya está. Te puede dar una macro de excel programa y decirla como ponerla en marcha, puedes pedirle que te explique lo que es la física cuántica de forma sencilla o que te haga un resumen de un acta de una reunión y te diga cuales son los siguientes pasos.
Aqui tienes un ejempo con "Escríbeme un guión de Youtube explicando la teoria de la relatividad de manera sencilla"
Increible. Preocupante. Asombroso. Peligroso.
Y no acaba ahí, porque encima es que puedes seguir preguntando sobre una misma conversación:
Puedes escuchar y leer artículos en donde se dice que va a ser el sustituto de Google, pero también otros tantos que dicen que es "peligrosamente estúpido".
Lo que está claro es que ya vemos por donde viene la I.A. y cuanto menos hay que intentar empezar a pensar cómo meterla en nuestro día a día.
Imagína cómo puede afectar al mundo educativo, al mundo de los asistentes físicos, a los desarrolladores de software, al mundo de la cultura y el cine, al sector hotelero o de reserva de viajes, al mundo financiero, al mundo... a cualquier mundo.
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